“A lo mejor es una cláusula secreta” del acuerdo para la instalación de UPM2, sugirió Daniel Panario.
Un importante número de investigadores de la Universidad de la República han presentado un recurso de revocación y jerárquico en subsidio, buscando la derogación inmediata de ciertos artículos de la “Reglamentación de la ley n.° 19.175, del 20 de diciembre de 2013, por la que se establece el régimen legal de la pesca y la acuicultura de los recursos hidrobiológicos que se realicen en el territorio nacional y en las aguas tanto continentales como marítimas sobre las que el Estado ejerce su soberanía y jurisdicción Decreto n.° 115/2018”, en particular los referidos a la investigación. El siguiente paso sería llevar esta exigencia al Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA), e incluso llegar a la Suprema Corte de Justicia (SCJ) si fuese necesario. “Esto va a llevar todo el camino que haga falta para derogarlo”, aseguró el Ing. Agr. y Dr. Daniel Panario,
No confío en el Ministro Benech
Daniel Panario, profesor grado 5 de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República, informó a La Juventud que el pasado jueves tuvo lugar una reunión entre autoridades de la UdelaR y del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (MGAP) para revisar esta gravísima realidad, pero según este importante referente académico en cuestiones vinculadas al agua, no arrojó resultados favorables.
“Hubo muy buena disposición. Fue una mesa de diálogo con la Pro Rectora de Investigación (Dra. en Quím. Cecilia Fernández), persona a la cual le tengo la más absoluta confianza; pero no le tengo la más absoluta confianza al Ministro Enzo Benech, que decidió establecer una mesa de diálogo en lugar de reconocer de plano que eso es un disparate y debiera derogarse ese artículo del decreto, que establece toda una cantidad enorme de limitaciones y de imposiciones para poder investigar aspectos sustanciales de los medios acuáticos”, dijo Panario.
“Yo conozco al Ministro. Sí, claro, efectivamente, vamos a dialogar a ver si se puede modificar alguna cosa… Mi punto de vista es que esos artículos del decreto hay que sacarlos, hay que derogarlos. ¿Qué vamos a dialogar? ¿Qué vamos a cambiar, en lugar de poner no sé qué vamos a poner no sé cuánto?”, se preguntó y concluyó que “Finalmente va a seguir siendo muy limitativa, salvo que se saque del decreto”.
Situaciones como éstas se vienen haciendo habituales en cuestiones vinculadas al agua. Tras aprobarse la Ley de Riego -que privatiza y contamina el agua-, desde el oficialismo “lo más crítico” que hemos escuchado es la posibilidad de modificar algunos aspectos en su reglamentación, dando la espalda al reclamo popular de derogarla. En los últimos días se presentó la reglamentación, y como hemos difundido incluso en voz del propio Panario, incorpora nuevos aspectos negativos a la ya nefasta ley.
¿Imposición de UPM?
Además, Panario sugirió que detrás de este decreto esté la intención de proteger la contaminación que pueda traer la nueva planta de la multinacional finlandesa. “Llama la atención además porque ¡Caramba! Con toda la sensibilidad que hay con el tema agua y más ahora con UPM2, que pongan una restricción es como decir que si el Río Negro está más contaminado no lo investiguen, no lo publiquen, no nada. A lo mejor es una cláusula secreta dentro de ese seudo contrato que nadie lo conoce completamente”, infirió.
Decreto Mordaza
Panario reconoció que el conjunto de investigadores universitarios se han vistos “sorprendidísimos” con algunos artículos del Decreto. “Desde la dictadura nunca había visto una Reglamentación de una Ley, un Decreto Reglamentario con estas características. Es prácticamente un Decreto que, desde el punto de vista de la investigación científica en recursos acuáticos y/o hídricos, equivale a una mordaza”, manifestó.
“Un organismo del Ministerio de Agricultura se abroga el derecho de decir qué es lo que se investiga y qué no, quién investiga y quién no”, explicó y agregó: “Muy probablemente a mí me dijeran No, Panario. Vos no vas a investigar esto, …ya he hablado demasiado”, concluyó.
Limitaciones
La nueva normativa establece que para poder investigar sobre el agua, hay que pedir autorización. “Una compleja autorización: quiénes son los que van a investigar, su currículum… me gustaría saber quién tiene currículum para evaluar mi currículum dentro del Estado y fuera de la Universidad, por ejemplo”, reclamó con autoridad.
El decreto tiene cosas de ese tipo, “quiénes van a participar… reserva de la información una vez procesada, no se puede publicar sin autorización, ¡ni siquiera en revistas científicas! No se puede publicar nada sin autorización.
Se ha convertido en un Decreto Mordaza”, afirmó.
Esto es gravísimo, “efectivamente está violentando la autonomía universitaria y la ley orgánica de la UdelaR, dado que tenemos por mandato investigar en todos los temas de interés nacional”, denunció.
El alcance
Según el académico, el Decreto reglamentario “Abarca a los recursos hídricos, en el más amplio sentido de la palabra”.
“Si tú quieres estudiar las bacterias que están en el embalse de Baygorria (donde está previsto la instalación de UPM2), tienes que permiso a la DINARA en este caso, la oficina de recursos acuáticos del MGAP. ¡Ni siquiera la DINAMA!”, exclamó escandalizado, y agregó que “protestaría igual si fuera la DINAMA; pero inclusive (con este decreto) la DINAMA también tiene que pedir permiso”.
Lo mismo ocurre con la OSE por ejemplo, “que en su carta orgánica dice que debe investigar –digamos- sus fuentes de agua, no solo el agua que potabiliza sino el agua bruta, también tiene que pedir permiso a la DINARA”.
Aunque Panario dejó abierta la posibilidad de que esto responda a negligencia de las autoridades, la reunión del jueves con el Ministro Benech en realidad no deja lugar a inocencias. “En realidad no sé si es un error garrafal de alguien que redactó una ley -había reparado previamente el profesor- y que los Ministros no la leyeron”.
“Y me refiero específicamente al Ministro de Agricultura, porque la Ministra de Medio Ambiente menos lo debe haber leído. Y además de eso no entiende, porque ha dicho que de Medio Ambiente no entiende nada… y yo le doy la razón: de Medio Ambiente no entiende nada”, sentenció.
Multinacionales libres
“Todos tienen que pedir permiso eventualmente, menos los que no son públicos. Porque esta obligación es para los públicos”, explicó Panario.
Si viene una empresa multinacional y quiere investigar sobre el agua “no tiene ningún problema”, denunció y agregó que “a lo mejor, haciendo un acuerdo con la Universidad de Montevideo (UM) o con alguna otra universidad privada, también se puede”.
“Claro… ¡que no se enteren que voy yo, por ejemplo!”, dijo con sarcasmo.
Antecedentes
A nivel nacional, “los únicos antecedentes de algo así son durante la dictadura… por alguna razón yo no entre antes a la Universidad”, aclaro Panario.
Mientras tanto a nivel internacional, en cuanto al “derecho comparado”, reconoció que “en otros países hay algunas cosas, pero en general lo que hacen referencia es a evitar pesca predatoria con fines de investigación, como hacen por ejemplo los japoneses que matan cientos de ballenas y dicen que lo hacen para investigar»